Conocemos a Eduardo Infante, autor de “Filosofía en la calle”
Nuestros alumnos de 1º Bachillerato leen en sus clases de filosofía el libro Filosofía en la calle, de Eduardo Infante, el cual “ha venido” a nuestro centro para charlar con ellos acerca de su obra.
Eduardo ha comenzado leyendo una carta dirigida a los alumnos de nuestro centro. En ella explicó cómo se interesó por la filosofía con la misma edad que ellos, y fue precisamente a partir de la lectura del La apología de Sócrates, el diálogo que Platón escribió sobre el juicio que condenó a su maestro. Lo curioso es que fue una lectura impuesta como castigo por su profesor. Este hecho le ha mostrado la importancia de las bibliotecas, pues en ellas podemos “conectar con vivos y con muertos”. Así, los libros no solo nos aportan conocimientos, sino que nos dan libertad y poder. De hecho, citó una frase muy significativa al respecto: “No hay pensamientos peligrosos, sino que pensar es peligroso”. Con esto transmitió a los alumnos la importancia de pensar por nosotros mismos y de vivir como pensamos.
Posteriormente habló sobre la importancia de las Humanidades, que para él no son solo útiles, sino también muy valiosas. En los últimos años el estudio de la filosofía y las Humanidades en general se ha desvalorizado, a raíz de comentarios que indican su poca utilidad. Para rebatir esta idea, comentó que “la filosofía no sirve para nada porque no es sirviente de ningún poder”, lo que le otorga un lugar privilegiado en nuestra vida, pues nos ayuda a ser nosotros mismos, independientemente de corrientes o movimientos de grupo. Así, animó a nuestros alumnos a ahondar en el estudio de esta materia, lo cual puede hacerse en cualquier lugar y momento, y cuyas cuestiones pueden dar profundidad a nuestras vidas. De esta manera la filosofía es tanto un arte de preguntar como un arte de vivir.
Después de estos interesantes detalles, se pasó al turno de preguntas por parte del alumnado, las cuales ocuparon la mayor parte del tiempo, pues los alumnos habían leído su obra y la filosofía va precisamente de eso, de preguntar. Así, “La escuela debe ser donde os preparemos para el mundo”, frase con la que Eduardo enfatiza la importancia del saber hacer frente al simplemente conocer.
Eduardo Infante nació en Huelva en 1977, pero lleva media vida residiendo en Gijón. Licenciado en Humanidades, enseña Filosofía en bachillerato con métodos nada convencionales: narra la muerte de Sócrates en un juzgado, explica Aristóteles paseando por el parque, invita a practicar el cinismo en las calles comerciales y nos cuestiona con sus #FiloRetos en las redes sociales con el fin de invitarnos a pensar la vida y vivir el pensamiento. De esta idea surgió también su primer libro, Filosofía en la calle, al que más tarde seguiría No me tapes el sol.
Esta actividad ha sido organizada por la profesora del Departamento de Filosofía de nuestro centro, Maribel Peña.